
La central nuclear Ascó I finaliza con éxito su recarga de combustible, en la que se incorporaron 600 profesionales
La unidad I de la central nuclear de Ascó (Tarragona) ha vuelto a conectarse a la red eléctrica tras finalizar su 27ª recarga de combustible que comenzó el 28 de abril, tal y como informa la operadora de la planta -Asociación Nuclear Ascó-Vandellós II (ANAV)- en un comunicado.
El proyecto de recarga, señala, fue redefinido como consecuencia de la pandemia por Covid-19 con el objeto de garantizar el desempeño de todas las tareas necesarias ajustando al mínimo las personas presentes en planta y organizando los turnos para establecer entornos de trabajo seguros para las personas.
Durante la 27ª recarga de combustible de la central nuclear Ascó I se han incorporado 16 modificaciones de diseño y llevado a cabo unas 7.600 órdenes de trabajo, entre las que destacan, además de la renovación de 64 de los 157 elementos combustibles que contiene el núcleo del reactor, la sustitución del sistema de manejo de combustible, la inspección visual remota del exterior de la tapa de la vasija, la revisión general de los sellos de dos de las bombas de refrigerante del reactor o diversos trabajos relevantes en sistemas de seguridad.
Para llevar a cabo las órdenes de trabajo planificadas, se han incorporado a la planta catalana 600 profesionales de diferentes perfiles y especialidades. ANAV destaca que todas las tareas que estaban previstas se han completado con éxito y total normalidad gracias a los estrictos protocolos y normas de seguridad implantados en la central.
Para realizar las 7.600 órdenes de trabajo de la 27ª recarga de combustible de la central nuclear Ascó I se han sumado a la plantilla habitual 600 profesionales
Algunas de las medidas extraordinarias de higiene adoptadas por la operadora de la central para garantizar la salud y seguridad de sus trabajadores y de la propia instalación han sido la reordenación de los accesos y las zonas de paso, la toma de temperatura para detectar posibles casos de fiebre. Adicionalmente, informa ANAV, se han realizado test rápidos de anticuerpos como medida preventiva para evitar posibles contagios de personas asintomáticas.
Además, con el fin de facilitar la movilidad de los trabajadores que han intervenido en la recarga, se han facilitado alojamientos centralizados para los cerca de 250 profesionales procedentes de fuera de la provincia de Tarragona evitando así su desplazamiento diario.