¿De dónde proceden los rayos cósmicos?
Preguntas y respuestas

¿De dónde proceden los rayos cósmicos?

El misterioso origen de los rayos cósmicos podría ser resuelto gracias a los últimos descubrimientos que apuntan hacia la aceleración de particulas en el espacio.

Apenas un siglo después del descubrimiento de los rayos cósmicos, aún se desconoce su procedencia y el motivo de su llegada a la Tierra. Lo único que se sabe con certeza es que algo más del 95 % de los rayos cósmicos que alcanzan la parte superior de la atmósfera son protones de alta energía, siendo el resto helio y otros núcleos.

Cada vez estamos más cerca de conocer el misterio del origen de los rayos cósmicos, gracias al estudio de la aceleración de partículas en el espacio

Anteriormente se especulaba que la procedencia de los rayos cósmicos podría estar en los estallidos de rayos gamma que podrían originarse en el colapso de grandes estrellas para formar agujeros negros, pero esto no parece ser correcto puesto que esto habría producido neutrinos de alta energía, y las observaciones realizadas en la Antártida no han encontrado indicios.

Algunas de las partículas que forman los rayos cósmicos tienen energías muy elevadas, del orden de 1020 electronvoltios (muy por encima de los 1013 que se conseguirán con el Gran Colisionador de Hadrones). Estas enormes energías pueden ser el resultado de la aceleración de los protones en muy largas distancias, posiblemente a causa de las explosiones de las supernovas, de los fotones del Big Bang o de agujeros negros masivos. Estos protones, a su vez, ven afectada su trayectoria por los campos magnéticos, de forma que llegan a la Tierra desde todas las direcciones.

Algunas de las partículas que forman los rayos cósmicos podrían ser el resultado de explosiones de supernovas, del Big Bang o de agujeros negros

Se cree que los rayos cósmicos podrían proceder de las colisiones con gases en el espacio interestelar. Se han detectado rayos gamma procedentes de los restos de supernovas y se ha comprobado que las nuevas supernovas tienen los campos magnéticos más fuertes y producen los rayos cósmicos de mayor energía. Las fuentes de los más potentes rayos cósmicos, con casi 100 millones de teraelectronvoltios (TeV), pueden ser los grandes agujeros negros de los centros de las galaxias.

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