
Almaraz completará su recarga favoreciendo la seguridad de suministro y la activación económica de la zona
El desarrollo de la primera fase de la recarga de la Unidad I de la central nuclear de Almaraz (Cáceres) -iniciada el 14 de abril- ha permitido a la operadora de la planta comprobar la eficacia de las medidas extraordinarias de protección implantadas con motivo del coronavirus y la necesidad de que la instalación esté preparada para ofrecer toda su capacidad de generación de energía al país en el momento en que se inicie la reactivación económica, según señala Centrales Nucleares Almaraz-Trillo (CNAT) en un comunicado.
Destacan que su prioridad sigue siendo la protección del personal frente al COVID-19
Ante estas circunstancias, CNAT ha decidido dar continuidad a los trabajos previstos para la recarga número 27, lo que permitirá no solo contribuir a la garantía del suministro eléctrico del país sino también impulsar la economía del entorno de la planta.
Los trabajos de recarga tendrán una duración superior a lo habitual y se prolongarán hasta la segunda semana de junio.
Centrales Nucleares Almaraz-Trillo destaca que su prioridad sigue siendo la protección del personal frente al COVID-19, por lo que mantendrá no solo los máximos niveles de prevención frente a la accidentabilidad, la seguridad nuclear y la protección radiológica sino también el uso obligatorio de las protecciones establecidas y de las medidas de higienización implantadas, limitándose, en todo momento, la concurrencia del personal en planta. Asimismo realizará un análisis continuo de la evolución de la situación por si fuera necesaria su actualización.
Las medidas adoptadas por la instalación cacereña están en línea con las implementadas por la práctica totalidad de las más de 30 centrales nucleares que a nivel mundial tienen planificadas paradas de recarga de marzo a septiembre de este año. Sus responsables señalan que se ha informado puntualmente tanto al organismo regulador -el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN)- como a las administraciones autonómicas y locales y autoridades sanitarias con quienes mantienen un contacto permanente.